Oseas 11 - El amor divino


"Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo. Cuanto más yo los llamaba, tanto más se alejaban de mí; a los baales sacrificaban, y a los ídolos ofrecían sahumerios. Yo con todo eso enseñaba a cuidar al mismo Efraín, tomándole de los brazos; y no conoció que yo le cuidaba..."

Hay veces en las que en mi vida personal, he sentido cariño de diferentes persona de mi alrededor, familia, amigos... y muchas veces no he aceptado ese cariño, no lo he acogido o simplemente no le he hecho caso. He podido poner mi peor cara aún recibiendo ese cariño. Al igual que Dios con su pueblo, mostraba mucho amor hacia su pueblo, pero ellos no hacía caso y pasaban más de Dios aún.

En este capítulo, al igual que en todo el libro de Oseas se habla del amor tan grande de Dios hacia su pueblo. "Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo". Cuanto más amaba Dios a su pueblo, más se alejaba de él y sus caminos. El pueblo de Israel caía en una constante desobediencia hacia el Padre.

En el capítulo de hoy podemos leer, que Dios amaba a su pueblo, pero éste no le seguía ni agradecía nada de ese amor, es más, cada vez desconocían y hacían más cosas malas que les hacían alejarse del Padre. Dios es justo, y al ver que el pueblo no le hacía caso tuvo que poner justicia y el castigo cayó en el pueblo.

Muchas veces nos podemos sentir con falta de cariño, desanimados, que nos falte alguien que esté ahí cuando estemos mal... pero tenemos que pensar que hay una persona que siempre está ahí, y que nos ama, ese es nuestro Padre. Tenemos que creer en Él y no pasar de Él, porque Él es nuestro creador y que menos podemos hacer que amarle al igual que Él nos amó a nosotros y nos sigue amando. El Señor, es un Dios compasivo, que sabe perdonar y amoroso, por eso si alguna vez pecamos, debemos arrepentirnos de corazón a él, porque es el único que nos salva.

Adam Martínez

Comentarios